La obra gráfica de Piet Swart quizá no ha trascendido con la fuerza de la de sus coetáneos holandeses (Mondrian, Van Doesburg, Rietveld...), sin embargo resulta enormemente rica a nivel compositivo y cromático al desmarcarse de la ortodoxia de De Stijl. Tanto en sus aportaciones para la revista 8 OPBOUW (la cual continúa y amplía a la vez la experiencia neoplástica) como en sus trabajos de imagen corporativa posteriores se aprecia un gusto por la composición más allá del plano del cuadro (del cuadro de imagen o imagen en sí) ampliando el efecto visual más allá de los límites del mismo. Aquí os ofrezco algunos de los ejemplos más atractivos que he podido recoger así como un análisis final de una de sus obras donde explico lo que os he contado.